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Romance de la Elisada y el conde de Monte Alvar - Nuevo Mester de Juglaría

Romance de Nuevo Mester de Juglaría de otro tiempo y de otro lugar. "Paseabas Elisada por sus altos corredores, y el conde de Monte Alvar, y el conde de Monte Alvar quiso tratarla de amores. Si quisieras Elisada aceptar a mis amores. No señor que soy muy niña, no señor que soy muy niña y lo sabrán en la corte. Juro la cruz de mi espada, juro la cruz de mi vida, que no se ha de saber nada, que no se ha de saber nada ni en tu corte ni en la mía. Y al cabo de nueve meses en el pueblo se decía que el conde de Monte Alvar, que el conde de Monte Alvar con la Elisada dormía. Su padre que estaba oyendo desde la sala de arriba, qué es eso de mi Elisada, qué es eso de mi Elisada, qué es eso de la hija mía? Que si eso fuera verdad yo viva la quemaría. El castigo que la dio, eso Dios no lo da a nadie, fue de meterla en un pozo, fue de meterla en un pozo que se la pudra la sangre. La fueron a visitar dos o tres primos carnales y un hermano que tenía y un hermano que tenía que le llamaban maldades. Asómate en hora mala, cara de quitar pesares, para mañana a las nueve, para mañana a las nueve que vendremos a quemarte. Si me queman que me abrasen, que a mí no me importa na. Lo que siento es lo del vientre, lo que siento es lo del vientre que muera sin bautizar. Si tuviera un pajarito de esos que yo echaba pan, para escribir una carta, para escribir una carta al conde de Monte Alvar. Si quieres un pajarito a tus pies lo tienes ya. Coge el pájaro la carta, coge el pájaro la carta y se va pa la ciudad. Al llegar al monasterio tres caballeros están. Cual de esos tres caballeros, cual de esos tres caballeros es el conde Monte Alvar? Qué quiere ese pajarillo del conde de Monte Alvar? Yo a usted no le quiero nada, yo a usted no le quiero nada, el papel se lo dirá. Si la queman que la abrasen que a mí no me importa na, lo que siento es lo del vientre, lo que siento es lo del vientre que de mi sangre será. Se vistió de capuchino y se fue pa la ciudad, y al llegar al monasterio, y al llegar al monasterio ya la iban a quemar. Deténgase la justicia la vara de la hermandad, que la Elisada es muy niña, que la Elisada es muy niña y se querrá confesar. Dime tu Elisada mía, por qué te van a quemar? Por un beso que le di, por un beso que le di al conde de Monte Alvar. Y por qué no escribes carta al conde de Monte Alvar? Sí señor ya se la he escrito, sí señor ya se la he escrito pero lo mismo me da. Por qué te va a dar lo mismo si a tus pies lo tienes ya? Por qué te va a dar lo mismo, por qué te va a dar lo mismo si a tus pies lo tienes ya. Deténgase la justicia, la vara de la hermandad, que la Elisada es muy mía que la Elisada es muy mía, y me la voy a llevar".